Autoevaluación
A lo largo de la cursada fui aprendiendo y obteniendo bastantes herramientas que me interesaron y ayudaron mucho al momento de realizar mi propia escritura. No solo esto, sino que también comprendí cómo analizar cuentos con ciertos conceptos. Esto último me sacó de mi zona de confort y me permitió visualizar conceptos que, si uno no presta demasiada atención, pasan desapercibido. Sin embargo, al realizar frecuentemente esta clase de ejercicios puede notar un avance en el cual ya logro identificar los conceptos de forma más rápida y simple.
Las consignas de escritura me motivan en gran medida, escribo desde muy chica y me encanta poder aplicar herramientas nuevas. Por un lado, la que más me gustó fue la autobiografía. Poder tener el material del cuadernillo de autobiografías, para inspirarnos, y notar como cada uno selecciona distintas formas de contar su propia historia me interesó mucho. Por otro lado, si bien me gusta la idea de escribir poemas, esta última consiga se me volvió más complicada. No comprendo muy bien cómo realizar su formato, si debo utilizar metáforas a lo largo de todo el poema o si debo rimar algunas cosas, me gustaría tener más herramientas para esta consigna.
Los cuentos que fuimos leyendo a lo largo de las semanas me interesaron mucho, el mensaje final que más me dejó resonando fue el del cuento “El chico sucio” de Mariana Enríquez; tanto que tuve la intención de ir a escuchar una de sus charlas a la feria del libro. Me gusta la dinámica de las clases en las que debatimos los cuentos y cada uno desarrolla sus propias interpretaciones y conclusiones de finales abiertos o la historia en sí. Estoy muy contenta con todo lo que aprendí y con la dinámica de las clases, me parece todo muy interesante.
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